Como visitante que llega a Lisboa en un crucero, quedará cautivado por el encanto único y la rica historia de la ciudad. Ubicada en la costa occidental de Portugal, Lisboa ofrece una combinación perfecta de encanto del viejo mundo y vitalidad moderna.
Explora las calles estrechas y sinuosas del distrito de Alfama, donde podrás sumergirte en la atmósfera auténtica de la ciudad y descubrir las impresionantes vistas desde el histórico Castillo de San Jorge. No se pierda la emblemática Torre de Belém y el impresionante Monasterio de los Jerónimos, ambos sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Deléitese con la deliciosa cocina local y saboree un pastel de nata, una tarta tradicional portuguesa, mientras contempla las impresionantes vistas del río Tajo. La cálida hospitalidad y las infinitas atracciones de Lisboa la convierten en un destino inolvidable para cualquier visitante de cruceros.